ROMPEPUERTAS EN PLENO CENTRO DE BERNAL



LOS VECINOS DE BERNAL YA NO RESISTEN MAS

(14/10/201) - No alcanza con reclamar ante las autoridades civiles ni tampoco con votar a este o al otro candidato. Porque las leyes están, los Organismos existen y las fuerzas de seguridad también. Entonces hablemos con los señores policías, ellos son los que tienen que dar la solución o declarar honestamente  el motivo por el cual, a cada momento hacen el ridículo, mostrando insuficiencia ante la osadía de los delincuentes.
Los vecinos de Bernal,  ya no resisten más la cotidiana ola de asaltos, robos y arrebatos.  En las últimas horas, (porque ya los delitos se registran por hora) una casa de familia de la calle 25 de Mayo, entre Chacabuco y Yapeyú, a las once de la noche, cuando todavía muchos no dormían, sufrió otro de los tantos asaltos a mano armada que se repiten casi delante de los ojos policiales que recorren sus organizadas “cuadrículas” pero que nunca están en la que los ladrones actúan impunemente.
En esta oportunidad, la casa estaba cerrada con llaves y “pasadores” y sus moradores todavía levantados. De pronto un fuerte ruido y cuatro hombres armados irrumpieron en su interior. Habían derribado la puerta de entrada, sí, la derribaron. Se llevaron todo cuanto de valor encontraron y el dinero del día, el que cada familia tiene para vivir, mientras que los aterrados propietarios no podían entender lo que les estaba sucediendo ni tampoco sabían si los dejarían vivos.
 No se trató de un hogar adinerado, son un pareja que trabajan los dos, que son empleados no empresarios, que son vecinos como tantos. Aquí no hubo motivo de “inteligencia previa” fue solo la elección al azar que los malvivientes realizan en sus recorridas por las mismas cuadrículas que, organizadamente cubren los móviles policiales.
Si todo está previsto, si hasta se inventó la Policía Local, si tenemos monitoreos de cámaras que televisan las calles, si se crearon Secretarías de Seguridad Municipales, si se crearon Comandos Regionales para reforzar la labor de las antiguas comisarías seccionales,   si se aumentaron las cantidades de “efectivos” y si todo esto no resulta efectivo, tal vez habría llegado la hora de intentar  un censo para saber de una vez por todas, si en esta, nuestra argentina, el crecimiento de la delincuencia, habría llegado a  superar al crecimiento de todo lo demás.

 En definitiva; basta de escuchar detalles de planes y programas.  Que hablen los Jefes Policiales, ellos son  los que están en la calle, los que no llegan a tiempo, los que no ven o no actúan en lo que sería prevención, como cada vecino lo constata ante los ineficaces paseos diurnos de las parejitas de “azules” que responden “no nos corresponde” cuando se les pide actuar ante algunas  obstrucciones del tránsito, no ven la aparición de personas en actitudes sospechosas, o se toman “descansos” en el interior de algunos comercios.