OBRA DE AYSA DESPERDICIA CEMENTO QUE VA A PARAR A DESAGÜES PLUVIALES

 (3/03/2022 - Por Pedro Navarro)  -  Desde hace un año y un mes, vecinos de la zona de “La Bernalesa”, (límite entre Quilmes y Bernal Oeste), padecen una obra lenta  -y eterna-  sin controles  que AySA realiza en ese barrio y que originó el cierre de la Avenida Lamadrid en varios tramos.

 Los más afectados son  quienes viven en las inmediaciones de la ex fábrica La Bernalesa, actual Parque Industrial. Origina serios inconvenientes en el ambiente por un polvillo que se desprende en muchas jornadas  y también arrojan cemento líquido a la calle.                                                                           Por el cierre los colectivos dejaron de pasar, hay comercios que cerraron y las calles adyacentes están detonadas.

Lo que es más grave y preocupante es que  se arroja cemento líquido que se desparrama por los cordones de las calles del barrio sin que nadie controle esa irregularidad. Ese cemento circula por los cordones y va a parar a los desagues pluviales.

Falta de colectivos

Por la Avenida Lamadrid, por esa zona, circulan varias líneas de colectivos: La 159, letra L azul; el 85, el 584 y la 266. Con el correr de los meses, esos medios de transporten no circulan más y los vecinos deben adivinar por dónde pasan. Generalmente hay que caminar entre 4, 6 u 8 cuadras para poder viajar. Los inspectores de tránsito, para verificar esa anomalía, brillan por su ausencia. El Municipio de Quilmes no cumple con su función de controlar y las empresas hacen lo que quieren.

Calles detonadas

El otro problema que surge es que al no haber circulación de vehículos sobre Lamadrid el tránsito se desvía por calles adyacentes, las cuales están detonadas, con muchos pozos y en algunos tramos intransitables. En este año, el Municipio tampoco se ha ocupado de este serio problema.

Negocios cerrados

Como si esto fuese poco, el otro problema que origina la obra, que no finalizó en enero de este año como prometía la secretaría de Desarrollo Urbano, a cargo de Cecilia Soler, es que varios comercios ven deteriorada su actividad porque por la zona circula muy poca gente. Algunos debieron bajar sus persianas. El Municipio de Quilmes; ausente y sin aviso.

Avenida Acha

El otro sector cortado que afecta la actividad comercial es Lamadrid a la altura de Acha. Vecinos de la zona se comunicaron con el Municipio de Quilmes. Un funcionario prometió llegar al barrio pero parece que se perdió en el camino.

Piden que la intendenta Mayra Mendoza se dé una vueltita por la zona para constatar lo que se denuncia y tratar de aportar alguna solución. Por ahora, sus funcionarios parece que ignoran el hecho.