LA DANZA DE LOS MILLONES

 Crónica de una larga historia que va a cumplir dos meses

 (1/11/2012)- Cinco días después de haber anunciado la promesa del Ministro De Vido, de enviarle a su municipio un aporte de 500 millones (BERNAL.ES 81) El intendente de Quilmes, Francisco Gutiérrez firmó  un nuevo convenio de cooperación y trabajo con la Ministra de Desarrollo Social Alicia Kirchner, para  la segunda etapa de implementación del programa de Ingreso Social con Trabajo -Argentina Trabaja.

Casi sin dar tiempo para celebrar estos logros anunciados, llegó el inesperado domingo 23 de septiembre, cuando Jorge Lanata puso bajo la lupa otros muchos millones en contundente denuncia periodística con testimonios directos de dos de sus protagonistas. Casi al unísono, una conocida abogada quilmeña demandó al Auditor Municipal, por no exigir las declaraciones juradas patrimoniales del mismísimo intendente y otros altos funcionarios.

Al ya inolvidable domingo “23 S” le siguieron cuatro Concejales que se encaminaron  con formal denuncia penal a la Justicia Federal. Además, un ex candidato de pocos votos en sus aspiraciones para intendente, también se sumó en la lista de demandantes.

Instalado el escabroso tema en la noticia local y nacional, el H.C.D. cubrió fugazmente las apariencias con la creación de una consabida Comisión, que no tardó en ser desactivada por la mayoría oficialista y sus aliados, antes que se recibiera el informe oficial solicitado al  Ejecutivo.

Por su parte, el Intendente, en despreocupada  actitud, no vaciló en mostrarse en público junto al principal acusado, su Secretario de la Producción Guillermo Robledo, con quién mantenía alejadas relaciones desde tiempo atrás.

 Luego, una solicitada en un medio de escasa lectura en Quilmes, negó todo y ratificó las seguridades del gobierno quilmeño de que esas denuncias (periodísticas y penales) podrían quedar en  anécdotas, tal vez apostando a la curiosa fortuna de los sorteos, que las había depositado en manos de los jueces Armella y Oyarbide. Otra prueba de la despreocupación oficialista, sería el alegre viaje del intendente Gutiérrez a Venezuela, en misión de veedor  para garantizar allá, el pleno acatamiento a las bondades del sistema democrático.

Ya regresado al país, con el triunfo de Chávez en su currículum, Gutiérrez llegó a tiempo para arengar a su gente y preparar acciones por él mismo calificadas de “históricas” cuyo resultado fue la irrupción en la Sesión del H.C.D. del 23 de octubre, logrando que los cuatro Concejales denunciantes no pudieran ingresar al recinto. Esto originó nueva denuncia ante la Justicia que tampoco inquietó al Jefe comunal, ya que en nueva reunión felicitó a sus cooperativistas por la bravuconada del H.C.D. y festejó con ellos su cumpleaños, dejando para otro día el regreso al trabajo de las cooperativas.

Esa vuelta al trabajo se vio tapada cuando el Deliberativo quilmeño se sumó a la danza de los millones y con justo quórum y justa mayoría, aprobó la iniciación de trámites para solicitar al Banco de la Nación, un préstamo de ciento veinte millones de pesos, para municipalizar la recolección de residuos domiciliarios y limpieza de la ciudad. Así se hará, pero todavía no se sabe de proyecto alguno para realizar tamaña tarea desde las áreas oficiales, como tampoco su costo operativo.  Solo una sospecha corre por los pasillos. Y es la posibilidad de que el señor Gitiérrez logre hacer trabajar a esa legión que, se dice, sería de nueve mil cooperativistas.  Aquellos arengados, felicitados y convidados al cumpleaños feliz.

En tanto, la ciudad sigue sucia, los contenedores no son vaciados en tiempo y forma, las ramas quedan en las calles y en los anuncios se baila la danza de los millones, mientras  se acerca  el último plazo de la estirada concesión a la empresa recolectora Covelia S.A. (esta historia no ha terminado)