LA MANIFESTACION; Crónica con opinión



(23/03/2018) - Tema y temor creciente;
la inseguridad avanza por los barrios desenfrenadamente.   Todo lo tremendista que pueda parecer esta expresión,  queda pequeña ante los relatos escuchados en la fracasada  (por lluvias)  manifestación vecinal convocada para el domingo 18/03 a las diez de la mañana en la esquina de la avenida San Martín y 9 de Julio.


Además de haberse convenido convocar a una nueva manifestación para el dia sábado 7 de abril a las 13 horas en esa misma esquina, en aquella reunión esquinera del 18, los pocos vecinos que desafiaron al mal tiempo, se trenzaron en un intercambio de opiniones que aportó más para el psicoanálisis que para la solución buscada con la modalidad de reclamar en la calle.
En la reducida rueda de vecinos altamente comprometidos con la realidad latente, casi todos victimas de hechos delictivos y/o para que no se repitan o no les toque, muchos fueron a deliberar en busca de la solución y algunos a delirar...                                     Pero en el conjunto, todo sirve
Ahora a bien, (o como se estila decir:  “a ver...”)  tanto unos como otros, no mostraron alentar otra alternativa que “la manifestación” con muchos, para “ser vistos y oídos”, pero en la esquina, donde si el número de manifestantes es numeroso, se corta el tránsito.                           Algunos razonaron sobre la acción impropia de cortar la libertad de circular a otros, los que también pudieran ser víctimas de la inseguridad en igual medida que los manifestantes.                                 Hubo razonamientos sobre  experiencias de convocatorias en locales cerrados. Pero según experiencias relatadas “si la hacemos en local  cerrado van cuatro...” .


No estuvo en las propuestas, la posibilidad de redactar un enérgico manifiesto, coronarlo con miles de firmas (muchas mas que las presencias que se puedan lograr en la calle) y presentarlo formalmente en todos los Organismos correspondientes, formando indestructibles expedientes o con recepción certificada  y luego,  difundir lo reclamado, indefinidamente y hasta con la posibilidad de hacerlo a nivel nacional y universal.
                                                             Es entonces la resultante del pensamiento argentino, movilizarse en masa para mostrar fuerza, proclamar consignas al viento y adueñarse de espacios comunes, en menosprecio del derecho al libre desenvolvimiento de nuestros  semejantes?.                                                                                                                             Porque así, como casi todos hemos sido víctimas de la inseguridad, luego de cada hecho, todos tuvimos la necesidad de continuar  concurriendo a cumplir con  nuestras obligaciones y también; a cualquiera puede ocurrirle la necesidad de atender una emergencia de salud o de cualquier índole y encontrarse con que “el derecho humano de manifestar” le impide acceder a su derecho, igualmente   humano, de circular libremente.


Muy razonables fueron la mayoría de las opiniones, pero pocas, porque había llovido hasta hacía poco...
Fu entonces que se resolvió  activar la acción de las redes sociales para convocar a la nueva manifestación el próximo sábado 7 de abril a las 13 horas, en esa misma esquina (por las dudas con paraguas).  Pero con recursos creativos para  lograr la mayor concurrencia.

Y se propusieron  aportar todas las creatividades posibles, menos la de recurrir  a “los políticos”. Esa idea fue rechazada. Tampoco hubo propuesta alguna de dirigirse a los medios de prensa... no obstante este medio, se adhiere a la promoción de la nueva fecha y volverá a estar presente, aunque llueva. NORBERTO GIALLOMBARDO.