OPINIÓN DEL OBISPADO


 (4/04/2014)- En este tiempo de cuaresma, donde estamos reviviendo la pasión, muerte y resurrección de Jesús, para que todos tengamos vida y vida en abundancia, como miembros de la Vicaría de Solidaridad de la Diócesis de Quilmes, queremos hacer llegar nuestra opinión sobre los hechos de violencia acontecidos en estos días, que se dan en llamar "linchamientos".
Consideramos que, bajo ningún punto de vista es aceptable que sea justicia, la que se hace por mano propia. Los conflictos deben resolverse institucionalmente, a través de los medios que nos propone el sistema democrático, aún cuando éstos presenten dificultades y en ocasiones, sean ineficientes.
Creemos también, como dice nuestro Papa Francisco que: "Ningún esfuerzo de pacificación será duradero, ni habrá armonía y felicidad para una sociedad que ignora, que margina y abandona en la periferia, una parte de sí misma". (Discurso favela pacificada de Varginha, Manginhos, Rio de Janeiro, 25 de julio de 2013)
Acompañamos la ansiedad y la angustia de las personas, víctimas de la violencia, en sus reclamos a los distintos poderes del Estado (poder ejecutivo, poder judicial  y fuerzas policiales) , para la construcción de una seguridad inclusiva, que aplique justicia, respetando y garantizando siempre los derechos de todas las personas.